jueves, septiembre 29, 2005

Antes de salir

En cuanto termine este post saldré de casa. Empezará así la jornada. Caminaré hacía el quiosco donde el buen hombre del que desconozco el nombre me dará, sin yo pedirlo, "El pais" (Yo tambien tengo mis dudas con El pais, pero sino es El Pais no es nada y al menos quedan algunas cosas buenas. Juan Cruz, Haro Tecglen, alguna aportacion esporádica de Goytisolo...). Cruzaré la acera y esperaré el autobus que me deja en el Paseo de Recoletos, casi enfrente de mi trabajo. Llegaré, saludaré y me meteré en la sala a montar. Eso es a grandes rasgos el arranque del dia, pero claro, hay tantos elementos que se me escapan en esta previsualización. No cuento con esa chica que se sienta enfrente y que te llama la atención, o esos dos hombres que mantienen una conversación en el asiento de al lado y que te despista de tu lectura. Meintras el autobus baja por la Castellana iré, ademas, pensando cosas, pero no se que me deparará mi cabeza. No se que frases se pasearán desde el subconsciente a la conciencia. Podría venir la idea inicial de una canción, podría venir la idea inicial de ese libro que nunca escribiré. Tantas cosas que desconozco de ese futuro inmediato al que lentamente me acerco. Comienza el dia.

3 comentarios:

Anónimo dijo...
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Anónimo dijo...

Comienza el día. Después de enviar este comentario me daré una ducha y pensaré en la agenda que hoy me espera. Esperaré a Angel (o Angel me esperará a mí), porque hoy no tenemos automóvil para irnos a San Felipe. Angel quedó en buscarme a las siete y media de la mañana. (Cuchi tal vez se vaya antes en su carro). Irme con Angel me permite dedicarme durante cincuenta minutos a la lectura. En este momento no sé qué voy a leer. Dentro de unos minutos lo sabré. Lo que sí sé es que mientras lea estaré escuchando las "Variaciones Goldberg", en la segunda versión de Glenn Gould. Antes de salir revisaré la edición digital de "El País", por la costumbre, porque todavía le tengo afecto. Convengo con Nacho: Juan Cruz, Haro Tecglen. Recuerdo en este momento el artículo de Ignacio Echevarría sobre el premio de novela "Rómulo Gallegos", donde con un sólo ejemplo pone al desnudo las debilidades (o miserias) del que fue también su periódico. El artículo de Echevarría fue publicado en el suplemento literario de El Mercurio, de Chile. Peor que G.Guerrero y Domínguez Michael, queda El País. Y ya es decir. Pienso ahora en la escritura y su dificultad de captar nuestra memoria simultánea. Las frases anteriores las escribí mientras a mi mente venía la novela de Isaac Rosa (mejor que la pseudo polémica que provocó su premio), la imagen de Eckar Raydán hablando anoche por su celular, en la entrada de la Torre B (hablaba de precios o algo así), trajeado de azul, corbata incluida. Ya olvidé qué otra cosa recordaba.

Vuelvo a los enunciados de la rutina. Cuando llegue a San Felipe, saludaré a Palmira y entraré a mi oficina donde me esperan papeles, llamadas, reuniones. Unas cosas las haré pensando en ellas. Otras no. Para éstas prendó el burócrata automático que hay en mí. Entretanto, un poema o sólo unos versos, me llevará hacia otros cielos, otros reinos, otros mundos.

Henry S. dijo...

Que emocionante!!. De verdad que si. Sentir el principio del dia de otros, tan lejanos, pero ahí, casi al lado

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