jueves, marzo 22, 2007

Café express

Aye vi una cosa sorprendente, preocupante. Alguien, en la cocina de su trabajo, ponía agua muy caliente a la cafetera electrica para que el café saliera muchisimo mas rapido. Por un lado pensé: "Esta bien. Vamos a bebernos el café tres minutos antes que si ponemos agua del tiempo", pero claro, por otro lado, esos tres minutos que nos ibamos a ahorrar se perdian de esa charlita que se monta, y que a mi me resulta muy agradable, alrededor de la cafetera, con la taza en la mano y comentando seguramente alguno de los titulares exagerados y casi cómicos de los periodicos gratuitos que siempre hay por encima de las mesas. Tres minutos, nos ibamos ahorrar tres minutos.

Así vamos arrancando tiempo al tiempo. Quitando tres minutos aquí , para luego terminar cinco minutos antes aquello para llegar dos minutos antes al otro sitio y coger el bus que nos llevará seis minutos antes allá . Así vamos comiendonos minutos, aquí, allí. Sumando y restando. Se empieza por hoy no me afeito que así me quito seis minutos, bajo por aquí, entro por allí y voy así, que me ahorro cinco minutos mas. Subo llego, pongo agua muy caliente que cae el café antes, me siento rapido, hago este trabajo así, lo mando de esta manera y me quito cinco mas. Lo preocupante no es ahorrarse minutos, lo preocupante es, que esos minutos que ahorramos no estoy seguro de que se nos guarden en la cuenta, no estoy seguro de que se sumen a nuestro patrimonio. Lo dudo, lo dudo mucho. La sensación, es que con tanto ahorro de tiempo lo estamos perdiendo de manera absurda.

No hay comentarios.:

Mi lista de blogs

Afuera