domingo, enero 07, 2007

Para Paul el desconocido

Hace tres años y medio ya que me operaron. Como sucede con todo, el tiempo ha ido haciendo trasparente el recuerdo de aquella época que inevitablemente marcó mi existencia. Durante una buena época viví bastante pendiente de la salud, algo acojonado e incluso obsesionado con la posibilidad de enfermar, de volver a dormir entre las paredes de aquel hospital y de pasar otra velada entre las paredes de un quirófano de estética muy setentera y desgastado ( ¿Porque carajo son tan feos los quirofanos?, en otra vida me gustaria ser diseñador de quirofanos).

El tiempo,, el tiempo y su abismal indeferencia hacía los presentes, fue menguando aquella resaca marcada por el temor que me quedó de aquel veraneo hospitalario. Hice, tengo que decir en mi favor, un esfuerzo mental muy potente para ir haciendo decrecer aquellos miedos y angustias que me acompañaron mas o menos los dos años siguientes. Lentamente fui perdiendo la atención en la salud, me sentía bien y volvía a confiar en mi cuerpo. En esto, como en todo, al final no es mas que un problema de seguridad, y creo que no fue mas que un problema de desconfianza hacía mi propio cuerpo lo que me tuvo algo agobiado todo aquel tiempo.

Hoy volvía de trabajar, a menudo paso por ese edificio circular donde pasé cuarenta dias de mi vida, pasaba en coche, ella iba conduciendo cuando vimos en medio de la avenida a unos chicos con un cartel inmenso, lo pegaban con rapidez en dirección a las ventanas del hospital. Traté de leer, miré, el coche iba rapido y el cartel no estaba aun extendido, los chicos apoyaban contra la valla que separa los carriles de duirecciones contrarias de la ancha avenida, era una tela blanca con una frase escrita en letras negras. Creo que leí algo así: "Despierta de nuevo Paul". Miré rapido al hospital con la extraña esperanza de ver a Paul asomado en una de las infinitas ventanas, giré y vi a los dos chicos, muy jovenes, que veloces seguian extendiendo y tratando de pegar la enorme pancarta. Pasamos de largo y perdimos de vista la escena. He imaginado a Paul, he imaginado una vida a Paul, he barajado posibilidades, sucesos detrás de esas posibilidades, he tratado de poner una historia a ese acontecimiento suelto del que desconozco todo salvo una frase. No sé quien es Paul, no se quien son sus amigos, no se que le sucede, que hace ahí dentro y como llegó pero he sentido un deseo enorme de saber que Paul va a despertar de nuevo.

¡¡¡Vamos Paul, coño, despierta de nuevo!!

1 comentario:

illot dijo...

Ánimo Paul!!!

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