domingo, agosto 22, 2010

Supervivientes

Este tiempo ha muerto. Este instante se cae como hojas, como sonidos. Tu estás y sin embargo siento que ya te fuiste, ya nada queda. Ya este tiempo es viejo y me veo recordando cuando estabas desnuda en esta cama. Estoy más en eso, en un sitio en el que esto ya no está y tu eres un nombre que me cuesta recordar, una imagen de la que seguro evoco ese trozo de carne que hay entre tu cintura y la cadera y que hace no tantos minutos, que son una eternidad, movías con una delicadeza que me ha hecho delirar. Porque serás tu pero reflejada en tu carne y posiblemente serás este olor que me traerá aquí cuando en algún rincón del mundo me lo encuentre por azar y evoque esta escena sin recordarla del todo, porque los instantes nunca están completos, son trozos que nos empeñamos en unificar en no se que tipo de formas imposibles. Esto ya no existe, esto se va desmoronando a trozos que luego ni siquiera completaremos. Un puzzle imposible de formar. Aquí cae otra pieza. Este tiempo ya es un eco y soy capaz de ver que eco es este dentro de millones de ecos, cuando sea una línea sonora perdida entre montañas, entre capas de otros ecos, otros tiempos. Este tiempo ha muerto, claro que si, y eso es lo que nos mantiene vivos. Pura supervivencia, muchacha. Dame otro beso.

No hay comentarios.:

Mi lista de blogs

Afuera