jueves, mayo 21, 2020

Ideas

Hay una idea sobre la música que es por la que me siento más atraído: la música es un lenguaje previo a la palabra. Las palabras son cárceles a veces. No en cuanto a comunicación, que ahí no lo es, sino en cuanto a pensamiento. El pensamiento abarca más que la palabra, llega más hondo y más lejos. Cuando haces la traslación al verbo, se van quedando cosas y en esta cantidad gigante de restos que se van perdiendo, yace parte importantísima del pensamiento. Lo que hablamos no  refleja con perfección el pensamiento. La metáfora sería, claro, la fotografía. La fotografía no es la realidad. Es otra cosa: incluso puede reflejar cosas distintas y novedosas, también ocultas y escondidas de la realidad, pero no es la realidad. La palabra es una fotografía del pensamiento. Refleja y muestra cosas, pero no muestra todo el pensamiento. La música abarca zonas que la palabra no puede abarcar y en general, creo, que abarca más, muestra más, va más allá. No es esto un desprecio por la palabra. Claro que no. Es un elogio del pensamiento y de su amplitud y de lo difícil que es abarcarlo. La idea de un cuento, de un texto o una historia , esconde otra idea. Si te nombran un libro que has leído, a tu pensamiento puede venir, de golpe y casi instantáneo la oleada absoluta que fue el proceso de leerlo, un tiempo que sumo varias horas y que sin embargo tu pensamiento atrapa en décimas de segundo, pero si tratas de hablar sobre él, el proceso se ralentiza. No recuerdas fragmentos, has olvidado personajes, el desarrollo de la trama, las hipótesis o reflexiones no las cuentas todas con precisión, sin embargo en tu pensamiento si puede estar entero, ahí, como un paisaje que observas. El creador a veces tiene un proceso similar. Hay un pensamiento, una masa repleta de cosas que trata de identificar. Empieza a traducirlo, aparecen las dificultades técnicas, el desarrollo de las cosas, los laberintos de la palabra, pero no es inmediato, de hecho, la mayoría de las veces, en el viaje, la idea o ese pensamiento agoniza, y e creador se da por vencido o acepta el resultado por puro agotamiento: no era la idea, no era el pensamiento, pero se ve incapaz de traducirlo tal cual.

No hay comentarios.:

Mi lista de blogs

Afuera