27 de gramos de Ketamina en el bote de los polvos de talco, aunque en Rio la Ketamina es accesible y buena. Llevamos la mitad del vuelo y estos duermen, yo no puedo, mantengo cierta excitación y un nerviosismo leve que me ataca cuando vuelo. No es vertigo ni pánico, es otra cosa. Abro el bolso de mano y echo manodel donormyl.
Aterrizamos sin problemas. Hemos dejado las maletas en casa del mulato amigo de Rolo, nos dijo que el mulato era como un hermano para él y que nos quedaramos allí, hemos charlado un poco con él y nos ha invitado a una excelente comida, hemos sacado la ketamina y nos ha dicho que de Europa siempre traemos pesima K. Nos hemos montado en su coche hemos atravesado una parte extraña o desconocida de la ciudad. Hemos llegado a Lapa. En Lapa hemos entrado en un portal, hemos subido unas cuanta escaleras y hemos llegado al apartamento de un fulano parecido a un dibujo animado. Actuaba y hablaba con calma, como si todo el rato estuviera solo o con gente que no era real. El Mulato nos ha dado a probar, resulta que el fulano es químico y hace y prepara el la Ketamina. "El mejor de este infierno" y yo me he imaginado que el infierno para el era Rio, y he imaginado a su vez Rio como un infierno y he visto calles en llamas o la playa nevada, el fulano químico ha encedido su equipo de sonido, un cacharro digno de ser escuchado, ha puesto música. No he reconocido el grupo pero los chicos y yo hemos empezado a bailar, el mulato se reía con cierta complicidad y el fulano químico no nos miraba, estaba a otra cosa, hablaba en voz baja, como repitiendose cosas que tenía que ir haciendo. De repente ha aparecido una mujer, parecía francesa. Le ha dicho algo al fulano químico y se ha ido. A mi me ha parecido no un angel sino una colección de luces o una proyección, un instante, era pero no era. El fulano químico me ha mirado y se ha acercado, me ha puesto algo en la boca y se ha dado la media vuelta, ha cambiado de disco. No había nada o había un todo, masa de humedad en la que me envuelvo, hay paredes mentales que se deshacen sin dolor. Me veo o recuerdo una noche de hace cuatro o cinco años y ya no soy aquel. Giro de nuevo y siento que los platos de la canción que suena son avisos de algo que está por venir. Ya no soy yo. Todo está en mi, pienso. El mulato está delante de mi, pero como al otro lado, sonrie y me coge la cara, me besa. El mulato sonrie y dice algo, pero se pierde o se envuelve con la música que esta sonando. Los chicos bailan y no me miran, el fulano químico ha desaparecido, el mulato me vuelve a besar y baila. De repente siento vertigo de que el fulano químico no esté, me preocupo unos segundos o un instante que parece unos segundos pero aparece con una mujer de unos cincuenta años. La mujer abre la puerta y se va y el fulano químico se acerca a Robertito, le pone algo en la boca y cambia nuevamente de disco. Es un paso definitivo o al menos parece que hemos cambiado de nivel, abajo quedaron los vapores, ahora todo es mas voluminoso. Me asomo a la ventana y veo la calle, un coche que pasa, el tamaño de la ciudad ha variado, las ciudades crecen por segundos, veo gente y de la ventana de enfrente extraigo una imagen objetiva que se traslada con precisión al diencéfalo. Lo que veo no es tanto una alucinación sino mas bien una suprarealidad. La realidad limpia de lo demás, al realidad como realidad, que nunca nos viene así. Una mujer se asoma a la ventana le dice algo a alguien que esta abajo, la mujer ve que la veo y me mira, en esos dos segundos percibo que no hay nada en ese mirar, ni siquiera la curiosidad de saber qu9ien es el que mira. El fulano químico está a mi lado, me habla por primera vez, pero no entiendo muy bien lo que quiere decir. No hay mensaje en su mensaje pienso, pero me coge de la mano y me lleva con él, entramos en una habitación, la francesa está tumbada viendo Los simpsons, el Fulano químico me tumba en la cama y se sienta enfrente, justo delante de la televisión. Lisa Simpson toca el Saxofón y la francesa le dice algo al fulano químico, hablan sobre Victor Hugo, rápido, ennumeran unas citas y el Fulano químico apaga la televisión, la francesa me besa y el fulano químico se pone a llorar, enciende la televisión pero la francesa ya no se deteiene, me vuelve a besar, el fulano químico se levanta y se va. Entonces la francesa dice que me quiere cortar el pelo, que me vaya con ella al baño, oigo desde el salón que el fulano químico cambia de disco. Aparece el mulato y se mete en la cama con nosotros. La francesa le pide que se vaya y el mulato sonrie y se va.
Hemos despertado en casa del mulato. Primera buena noche en Rio
http://youtube.com/watch?v=lH-wuTV8TnY
No hay comentarios.:
Publicar un comentario